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L´Eggs

sábado, agosto 31st, 2013 | Barcelona, Restaurantes

Paco Pérez sigue a toda máquina. Las estrellas de Miramar y la Enoteca dan para iluminar un buen ramillete de proyectos, como The Mirror, La Royale, 5 Restaurant (en el Hotel Das Stue de Berlín) y, recientemente, los huevos -de Calaf, por supuesto- de L’Eggs.

Ubicado en la parte alta del Passeig de Gràcia, en un local amplio de prolífico currículo (Fernández, Els Jardinets…), L’Eggs ofrece. como su nombre indica, un buen número de preparaciones con huevos y algunas menos sin ellos.

El día de autos, poca asistencia nocturna en un martes que coincide con las fiestas de Gràcia. Ante la gran disponibilidad de elección, nos apropiamos de una de las mesas del fondo, con vistas a la cercama cocina semiabierta.

Nuestra estrategia,un cuarteto de platos a compartir entre dos. Empezamos con los de huevos, llegando al unisono la tortilla de ventresca, cebolleta y mayonesa, y el revuelto de gambitas -de tamaño más que digno- al ajillo.

Muy correcta la primera, jugosa y con buena proporción en sus ingredientes, y mejor aún un magnífico revuelto, suave y muy sabroso, expandido el sabor del marisco en toda la preparación -por cierto, realizada con espuma de huevo-, quizás con el único handicap de que el recipiente de servicio, de hierro colado, continúa la cocción y obliga al comensal a estar atento al punto.

Ya cerrada la parte ovo del menú llegan los chipirones con garbanzos, plato recomendado por nuestro camarero, luciendo muy sabor general y textura en la legumbre, aunque echándose en falta una mayor presencia física del pequeño calamar.

Y pasando a las carnes, una golosa papada ibérica confitada, sobre una base de algas al sésamo, con una suave salsa teriyaki y unas gotas de mayonesa.de miso. Si no fuera una bomba hubieran caído dos platos…

En los dulces, un irreprochable soufflé de chocolate con helado de avellana -sigue la moda de los coulants, convendría reinventarse un poco…- y todo un clásico que vuelve, un gustoso arroz con leche, ligerísimamente quemado -en el buen sentido, se entiende-.

En las copas, el Priorat de Les Crestes 2011, un buen tinto de los viñedos más jóvenes del gran Celler Mas Doix, que se mostró lo suficientemente fresco para combatir la potencia de los platos, y lo suficientemente sabroso para aportar su propia personalidad.

Con todo, unos 35 euros por persona.

Post written by Daniel Muro

Tags: barcelona, huevos, paco pérez, Restaurantes, revuelto, tortilla

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